Mostrando entradas con la etiqueta Lady Gaga. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Lady Gaga. Mostrar todas las entradas

22 abril 2011

And this time I’m not leaving without you



http://www.youtube.com/watch?v=2HSex-i6z4w

"You and I" - Lady Gaga


It’s been a long time since I came around
It’s been along time but I’m back in town
But this time I’m not leaving without you

You taste like whiskey when you kiss me oooh
I’ll give up anything again to be your baby doll
Yeah this time I’m not leaving without you

You said sit back down where you belong
In the corner of my bar with your high heels on
Sit back down on the couch where we
Made love for the first time
And you said to me

There’s something, something about this place
Something about lonely nights and my lipstick on your face
Something something about my cool Nebraska guy
Yeah something about
Baby you and I

Been two years since I let you go,
I could’ve listened to a joke for rock n roll
And muscle cars drove a truck right through my heart

You taste like whiskey when you kiss me oooh
I’ll give up anything again to be your baby doll
Yeah this time I’m not leaving without you

You said sit back down where you belong
In the corner of my bar with your high heels on
Sit back down on the couch where we
Made love for the first time and you said to me,

There’s something, something about this place
Something about lonely nights and my lipstick on your face
Something something about my cool Nebraska guy

Yeah something about, baby you and I
You and I
You, you and I
You, you and I
You you and I
You and I
You you and I
You you and I

[piano solo]

You said sit back down where you belong
In the corner of my bar with your high heels on
Yeah you like the red ones
Sit back down on the couch where we Made love for the first time and you said to me,

There’s something, something about this place
Something about lonely nights and my lipstick on your face
Something something about my cool Nebraska guy
Yeah something about
Baby you and I

You and I
You and I
You you and I
You you and I
You and I

You you and I
You you and I
You you and I

Been along time since I came around
Its been along time but I’m back in town
And this time I’m not leaving without you



Primera versión de la que se incluye en el álbum "Born this way" (2011)



*******

Porque en esta ocasión no te dejaré ir . Porque no volveremos a estar separados.

Prepárate en julio xD




***

18 abril 2011

Los reyes del 'Glam'


Cuarenta años después de su momento álgido, el más escandaloso de los movimientos musicales es reivindicado por figuras como la omnipresente Lady Gaga. Un libro reciente revela que infinidad de grupos y solistas intentaron subirse al carro del 'glam rock'.


El mundo ha seguido con pasmo la ascensión de Lady Gaga: parece un monstruo surgido de la nada, pero incluso los monstruos tienen raíces, influencias, modelos: las indumentarias imposibles, el sentido teatral y la ambigüedad sexual de Stefani Joanne Angelina Germanotta nos retrotraen a un momento único de la música pop. El glam rock, a veces conocido como glitter rock, dominó las listas británicas entre 1971 y 1974, irradiando al resto del planeta.

Dave Thompson, el más prolífico de los biógrafos del rock, prefiere ampliar ese periodo. Acaba de publicar un minucioso catálogo, Children of the revolution, que cubre mes a mes desde 1970 hasta 1975. Hubo un movimiento masivo. Por debajo de las estrellas -T. Rex, Slade, Sweet, Bowie...- aparecen centenares de grupos y solistas que simplificaron su música y recurrieron al rímel. La liberación escénica de Elton John y Freddie Mercury solo se entiende en el clima de tolerancia generado por el glam rock, simplificado en España como gay rock.

Hasta 1970, en el mundo de la música popular la homosexualidad era el gran tabú. La industria del pop británico de los sesenta estaba controlada en parte por sodomitas muy precavidos, que no toleraban que sus pupilos hicieran la mínima concesión. ¡Ni en broma! Eso habría sido fatal para vuestra carrera, aseguraban: un incidente menor había torpedeado la de Johnnie Ray.

Ocurrió en 1970 que los Kinks triunfaron con Lola, la risueña crónica de un inocente que visita el Soho, conoce a un travestido y descubre la felicidad. Testimonio de la habilidad de su líder, Ray Davies, es el hecho de que la BBC no pusiera pegas a ese argumento... Solo obligó a cambiar una mención a Coca-Cola, considerada publicidad encubierta. Ese mismo año, el hirsuto Marc Bolan abandonaba el hippismo: su grupo, Tyrannosaurus Rex, se transformaba en T. Rex, a la vez que giraba hacia un rock pegajoso, marcado por su voz de borreguito.

La fórmula despegó. Bolan había descubierto un hueco enorme. La música estaba marcada por el rock progresivo, elitista y difícil de tararear; el prog rock era escuchado por un público universitario y difícilmente podía seducir a adolescentes. Por la brecha de T. Rex se colaron extraños animales, exhibiendo pantalones ajustados, telas satinadas, botas de plataforma, bisutería, maquillajes descarados, purpurina. Era música de chillidos, de ropa interior humedecida, de fotos cubriendo las paredes del dormitorio. Resumiendo: de fans.

Una eclosión de fantasía y provocación que arrebató a una generación. Muchos recuerdan el impacto de ver a David Bowie en la televisión, bello como un dios y exótico como un alienígena. Como Bolan, Bowie se había subido a todas las tendencias posibles: había sido mod, hippy, folky, underground. Pero también experimentó sexualmente y se vistió de mujer lánguida para su elepé de 1971, The man who sold the world. Al año siguiente se recicló en prototipo de la estrella de rock con Ziggy Stardust. Cimentó su reputación en los escenarios cuando se arrodilló ante Mick Ronson, su guitarrista, simulando una felación a través de la Gibson. Hasta entonces, confesaba Bowie, le habían tratado "como a una rubia tonta".

Destacar a Bolan y Bowie puede ser engañoso: ellos tenían una visión artística personal. Pero la mayoría del glam rock era música de productores y compositores. El equipo Nicky Chinn-Mike Chapman confeccionó éxitos para Sweet, Mud, Smokey y la rockera Suzi Quatro. La música era pegajosa y chillona, a veces con ritmos tribales o basada en mutaciones del rock and roll de los cincuenta. Eso permitió que veteranos como Paul Raven o Shane Fenton cosecharan éxitos en los setenta, tras rebautizarse respectivamente como Gary Glitter y Alvin Stardust. En realidad, este es un movimiento más definido por su estética que por su sonido. Poco tenían que ver Roxy Music con Slade. Unos eran cazurros que habían probado todo antes de hallar la fórmula sonora, con títulos que se burlaban de la ortografía inglesa. Los otros representaban a músicos más cultos.

Las letras del glam tendían a celebrar la agresividad, la exuberancia del adolescente. Aunque fueran obra de compositores adultos, sugerían el fantasma de una juventud belicosa y hormonada. Entre la sociedad biempensante británica despertaba un temor palpable, como comprobó Stanley Kubrick, tras aparecer imitadores de la violencia de su Naranja mecánica. Para acallar las críticas y las amenazas, vetó la exhibición de la película en el Reino Unido, una prohibición que se mantuvo hasta su muerte.

El glam rock cortaba el anhelo insurreccional de los sesenta. Lo más parecido a un himno que tuvo el glam fue All the young dudes, canción de David Bowie cedida en 1972 al grupo Mott the Hoople, que explicitaba esa ruptura generacional: "Mi hermano está en casa / con sus Beatles y sus Stones / nunca me inspiró esa historia de la revolución / qué rollo, demasiadas complicaciones".

Lo que tenía de revolucionario el glam rock habría que buscarlo en la liberación sexual. La imagen de los grupos podía servir de revulsivo, como comprobó Sweet en su visita a la TVE franquista. Cuando los músicos salieron de sus camerinos pintados como puertas, alguien decidió que eran demasiado para el telespectador, aunque estuvieran anunciados en un programa de la segunda cadena: "¡Son unos maricones!". Sin embargo, eran heterosexuales.

Si algo llama la atención del glam rock de los setenta es precisamente la normalidad de sus letras en lo erótico. La única canción de éxito realmente explícita es Walk in the wild side, que describe la muchedumbre polisexual que orbitaba alrededor de Andy Warhol. Su autor, Lou Reed, fue agrupado brevemente con la tropa del glam, debido a su relación creativa con Bowie y por algunas concesiones mínimas a la bohemia gay de Nueva York.

Claramente apolítico, el glam rock no generó un solo cantante capaz de reivindicar la homosexualidad. Hubo que esperar a 1977, cuando -aprovechando el cambio de guardia causado por el punk- apareció Tom Robinson, artista identificado con el Frente de Liberación Gay. Aquello se tomó como una pose. Abundantes boutiques londinenses proporcionaban ropa y calzados audaces para quienes jugaban al equívoco, como Mick Jagger o Rod Stewart.

En Estados Unidos lo tenían más duro. Se identificó con el glam rock a grupos en nada distanciados de la sexualidad convencional, como Alice Cooper o Kiss. Aunque en la guía de Dave Thompson se rescatan olvidados grupos norteamericanos de sonido glam, desde Milk 'N' Cookies hasta los Hollywood Brats, la aportación más llamativa de EE UU fue Jobriath, un imitador de Bowie que consiguió un adelanto entonces astronómico -medio millón de dólares- a cambio de fichar por el sello Elektra. Fue un lanzamiento lleno de caprichos: el apoderado de Jobriath daba las entrevistas, en vez del cantante: "Tiene tanto talento que se comporta como Greta Garbo".

Muy cinematográfico, aunque no hay una aglomeración para rodar películas sobre el glam, tras el fracaso de Velvet Goldmine en 1998, una historia escrita y dirigida por Todd Haynes, basada en la leyenda de Ziggy Stardust, con elementos biográficos prestados de Iggy Pop, Marc Bolan o Lou Reed. El protagonista desaparecía tras un concierto apoteósico y un periodista investigaba el misterio.

El glam rock no tuvo un final tan dramático. Fue punto de partida para artistas inteligentes, pero supuso el final para talentos menores. Al ser una música para públicos masivos, pudo reducirse a fórmulas chicleteras como las utilizadas por los Rubettes o los Bay City Rollers. Sus oyentes más valientes pasaron a hacer música con bandas tan populares como los Smiths. Su vocalista, Morrissey, evocaba el huracán: "Cuando era niño quería ser cualquier cosa salvo ordinario. Hasta los setenta, las listas de pop contenían música que podía gustar a tus padres e incluso a tus abuelos. Repentinamente aparecía gente tan subversiva como Marc Bolan. Ahora pueden ser aceptados, pero entonces se consideraba que corrompían la moral de los jóvenes. Yo pensaba que era fantástico, que quería ser corrompido". Lady Gaga podría entenderlo.


Diego A. Manrique
El País
17 de abril de 2011






http://www.youtube.com/watch?v=_h_uSbsUSSM




***



14 febrero 2011

'Cause I'm a freak bitch, baby!


http://www.youtube.com/watch?v=grKF_AcmYdc

"Bad Romance" - Lady Gaga (Live X Factor, 2009)


Oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh!
Caught in a bad romance
Oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh!
Caught in a bad romance

Rah-rah-ah-ah-ah-ah!
Roma-roma-mamaa!
Ga-ga-ooh-la-la!
Want your bad romance

Rah-rah-ah-ah-ah-ah!
Roma-roma-mamaa!
Ga-ga-ooh-la-la!
Want your bad romance

I want your ugly
I want your disease
I want your everything
As long as it's free
I want your love
(Love-love-love I want your love)

I want your drama
The touch of your hand
I want your leather-studded kiss in the sand
I want your love
Love-love-love
I want your love
(Love-love-love I want your love)

You know that I want you
And you know that I need you
I want it bad, your bad romance

I want your love and
I want your revenge
You and me could write a bad romance
(Oh-oh-oh--oh-oh!)
I want your love and
All your lovers' revenge
You and me could write a bad romance

Oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh!
Caught in a bad romance
Oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh!
Caught in a bad romance

Rah-rah-ah-ah-ah-ah!
Roma-roma-mamaa!
Ga-ga-ooh-la-la!
Want your bad romance

I want your horror
I want your design
‘Cause you're a criminal
As long as you're mine
I want your love
(Love-love-love I want your love-uuhh)

I want your psycho
Your vertigo stick
Want you in my rear window
Baby you're sick
I want your love
Love-love-love
I want your love
(Love-love-love I want your love)

You know that I want you
('Cause I'm a free bitch baby!)
And you know that I need you
I want it bad, bad romance

I want your love and
I want your revenge
You and me could write a bad romance
(Oh-oh-oh-oh-oh!)
I want your love and
All your lovers' revenge
You and me could write a bad romance

Oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh!
Caught in a bad romance
Oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh-oh!
Caught in a bad romance

Rah-rah-ah-ah-ah-ah!
Roma-roma-mamaa!
Ga-ga-ooh-la-la!
Want your bad romance

Rah-rah-ah-ah-ah-ah!
Roma-roma-mamaa!
Ga-ga-ooh-la-la!
Want your bad romance

Walk, walk fashion baby
Work it
Move that bitch crazy

Walk, walk fashion baby
Work it
Move that bitch crazy

Walk, walk fashion baby
Work it
Move that bitch crazy

Walk, walk passion baby
Work it
I'm a free bitch, baby

I want your love and
I want your revenge
I want your love
I don't wanna be friends

Je veux ton amour
Et je veux ta revanche
J'veux ton amour
I don't wanna be friends
Oh-oh-oh-oh-oooh!
I don't wanna be friends
(Caught in a bad romance)
I don't wanna be friends
Oh-oh-oh-oh-oooh!
Want your bad romance
(Caught in a bad romance)
Want your bad romance!

I want your love and
I want your revenge
You and me could write a bad romance
Oh-oh-oh-oh-oooh!
I want your love and
All your lovers' revenge
You and me could write a bad romance

Oh-oh-oh-oh-oooh-oh-oh-oooh-oh-oh-oh-oh!
Want your bad romance
(Caught in a bad romance)
Want your bad romance

Oh-oh-oh-oh-oooh-oh-oh-oooh-oh-oh-oh-oh!
Want your bad romance
(Caught in a bad romance)

Rah-rah-ah-ah-ah-ah!
Roma-roma-mamaa!
Ga-ga-ooh-la-la!
Want your bad romance



*******


Porque no todo en este día debe destilar litros y litros de melcocha ;-)



***

08 enero 2011

La bisnieta de Frankestein sigue a Lady Gaga






La afición por el amor, lujo y lentejuelas entre los adolescentes no tiene visos de ir a desaparecer. Muy al contrario, no deja de crecer con el apoyo de poderosas campañas de marketing. En los noventa los protagonistas de la serie estadounidense Sensación de vivir, (Beverly Hills 90210) ricos, guapos y glamurosos, despuntaban en los bailes del instituto al tiempo que se enfrentaban a sus inseguridades. En 2010 el escenario estudiantil es el mismo: clubes, fiestas de pijamas, animadoras lideradas por una barbie o guaperas del rugby (fútbol americano) . Pero hoy los personajes humanos, imbuidos en sus traumas juveniles, comparten su amor por Lady Gaga y la estética Beyoncé con familiares de clásicos de terror, niños fantasmas con cuentas pendientes con su pasado terrenal, hombres lobo, ángeles o zombis. Grandes dosis de humor para contar historias de amor que en el sector editorial etiquetan como "romance paranormal".

Detrás de estos superventas están unas autoras -que no autores- jóvenes, modernas y con una sólida carrera profesional en la televisión, la publicidad o la música relacionada con la adolescencia. Es el caso de las estadounidenses Tonya Hurley, cineasta y ex publicista de estrellas como George Michael, Prince o Depeche Mode; Lisi Harrison, ex guionista del canal MTV, o Gitty Daneshvari, ejecutiva de una agencia de entretenimiento.

"Las historias de amor paranormales y prohibidas están lo suficientemente alejadas de la realidad como para resultar exóticas, pero los protagonistas son lo suficientemente accesibles como para darnos la llave que nos permite abrir la historia", opina Lauren Kate, autora de la saga Oscuros y ex editora juvenil. Así el ángel Daniel, que despliega unas alas de tres metros, lleva zapatillas Converse, camisetas de estudiados rotos y conduce un Alfa Romeo.

Son títulos irónicos, de estructura fácil y una estética gótica muy pensada: páginas, por ejemplo, con el filo fucsia, portadas negras -¿quién imaginaría ese color para un público preadolescente?- decoradas con calaveras de strass o el dibujo de una niña fantasma. Su perfil lector: una chica de unos 12 años a la que no imponen las 200 páginas de estos volúmenes, y sí las 500 de los novelones en la estela de Crepúsculo. Aunque la tetralogía ha expandido su público por encima y por debajo de los 16 años, su éxito, además, lo apuntalan las redes sociales, el merchandising más sorprendente y en último extremo el cine, las series de televisión e incluso los musicales.

Durante 12 años nadie quiso publicar la serie Ghostgirl (Alfaguara Infantil y Juvenil / Estrella Polar), la historia de Tonya Hurley sobre Charlotte, una adolescente que se sentía "la hija no deseada de Hawthorne High", que idea un plan de popularidad (pelo, régimen, armario...) con el fin de atrapar a su objeto de deseo, Damen Dylan. Pero tiene la mala suerte de morir "por una golosina semiblanda con forma de osito", según cuenta ella misma. Desde entonces, es un fantasma que en el primer libro busca la forma de acudir con Damen al Baile de Otoño.

"Los editores me decían: 'La historia está muy bien, pero la niña muere...'. Yo me quedaba perpleja: si no muere no hay historia. Ahora no está mal visto hablar de la muerte a los adolescentes", piensa Hurley, quien el pasado noviembre, y por segundo año consecutivo, se citó con fans en Madrid y Sevilla. Las ventas de los tres volúmenes que componen la serie: Ghostgirl (2008), Ghostgirl. El regreso (2009) y Ghostgirl. Loca por amor (2010), superan los 170.000 ejemplares de venta (según Nielsen). "En el instituto era popular. Era la única de todo mi Estado con el pelo púrpura y tenía una banda punk, pero también era insegura, como todos, y esa falta de autoestima es lo que quería contar", recuerda quien con sus live actions, documentales, cortos y animaciones ha acudido a festivales de la talla de Sundance, Tribeca o Los Ángeles.

Lisi Harrison también se recuerda muy integrada. "Pero en Monster High hay mucho de mis inseguridades. Por ejemplo, de cuando empecé a tener pelos en las piernas. Como Claudine, la hija del hombre lobo, que lucha contra sus pelos. O en no sonreír para no enseñar el aparato como Lala, la hija de Drácula, porque no se le vean los colmillos".

Monster High (Alfaguara Infantil y Juvenil / Estrella Polar) cuenta la historia de Frankie Stein, una chica de apenas quince años de color menta con costuras y tornillos, obsesionada por la ropa, Lady Gaga o las compras online. Cuando sus padres la envían al instituto estucada de maquillaje, su plácida existencia salta por los aires al convivir con los normis.

Gitty Daneshvari, autora de Escuela de frikis (Montena), tampoco tiene reparos en reconocer sus temores: "Al principio los personajes eran solo facetas de mi personalidad. Aunque, claro, llegaron a ser ellos mismos conforme avanzaba en la escritura", recuerda. Se acaba de publicar el segundo tomo, Escuela de frikis. Y llegó Hicklebee-Riyatulle, sobre cuatro niños que tratan de curar sus fobias en una escuela de verano. Warner Bros planea estrenar la película en 2012.

Cada capítulo de Escuela de frikis, que será una tetralogía imitando a Harry Potter para mostrar el progreso de los niños, arranca con la definición de una fobia, una manera de "demostrar que todo el mundo tiene miedo a algo", como la blenofobia, aprensión a lo pegajoso. En Ghostgirl también una frase de alguien conocido como Oscar Wilde o un trozo de canción de Depeche Mode preceden a cada apartado. "Esas frases me venían a la cabeza cuando escribía y es una forma de homenajearles y si, además, los jóvenes aprenden algo mucho mejor", cuenta Hurley, coproductora de dos series de las gemelas Olsen.

En el caso de Monster High el marketing se adelantó a la literatura. Mattel sacó a la venta unos monstruos de plástico rendidos a la moda más cool. Y visto el éxito decidió regalarles una vida a cada una. Para lograrlo apostó por caballo ganador. Contrató a Lisi Harrison, ya popular por su serie de libros The clique y The Alphas, sobre pizpiretas colegialas, que suman ya 22 entregas. "Ellos tienen unas muñecas maravillosas y me dieron toda la libertad del mundo. Es una gran oportunidad para mostrar a los monstruos con sentido del humor y angustia adolescente. Nos tenemos que aceptar y reírnos. ¿Qué otra opción tenemos?".

"Conservo una historia-biblia que contiene hasta el más mínimo detalle de cada personaje. Su ropa, sus características físicas, sus latiguillos y sus enamoramientos", continúa Harrison. "En mis libros cambian más de amores que de ropa y tener la información organizada es la clave". Por ejemplo, Cloe, descendiente de La Momia, arrasa "imitando el look glamuroso de Riahanna con calcetines marrones metalizados, minivestido de tela vaquera...". Alfred Gough y Miles Millar, creadores de la serie Smallville, escribirán para Universal Pictures la versión cinematográfica.

"En la MTV aprendí a captar la atención de los adolescentes. No se les habla con condescendencia como suele ocurrir. Esa época de tu vida es tan emocional. Cada situación se vive como a vida o muerte. Y una reina del drama como soy yo convierte eso en algo divertido", bromea Harrison. "Son unos años muy crueles y hay que tratarles de tú a tú", considera también Hurley.

En Mi profe es un vampiro (La meva profe es un vampir / Mac Millan), del periodista Lewis Harris, también el lío está servido. Svetlana Grimm, una vampira que duerme bajo la cama y solo come alimentos rojos, se ve obligada a salir de su mundo secreto para asistir a sexto de primaria en un instituto de California. Este Estado soleado y dinámico es el escenario de muchos de los libros. También se sitúa allí la Escuela Costa, el centro en el que humanos y descendientes de ángeles aprenden en la segunda parte de la saga Oscuros (El poder de las sombras / Turment, Montena / Estrella Polar), de Lauren Kate, amor gótico para lectoras algo mayores, que Disney llevará a la gran pantalla. Y a otra escuela, la Montgomery High, esta vez enclavada en una pequeña localidad perdida, llega un inquietante alumno pálido y de gafas oscuras. Todas suspiran por él, pero su destino se cruzó hace años con el de Dawn. Lynn Raven, una seguidora de Anne Rice, es la autora de El beso del vampiro (Destino).

Esta comunión entre mortales y seres fantásticos se produce también en Enciclopedia de los monstruos (Edebé), de varios autores. William, de 17 años, hijo de una humana y un hombre lobo, habla en un volumen ilustrado de las criaturas fantásticas que ha ido conociendo. En la misma línea informativa para quienes quieren saber más de esta temática terrorífica está El libro de los vampiros (Bruño), que recopila leyendas, tradiciones y misterios de estos bebedores de sangre.

En el próximo trimestre las novedades de colegiales no decaen. La jefa de publicidad de Stephenie Meyer, Elizabeth Eulberg, debuta con El club de los corazones solitarios (Alfaguara Infantil y Juvenil) y cuenta, claro, con el favor de la madre de Crepúsculo: "Es una lectura para todos aquellos que se hayan enamorado alguna vez... o renegado completamente del amor".


Elisa Silió
El País
Babelia
1 de enero de 2011





***

16 mayo 2010

La culpa fue de GaGa

Lady Gaga en el video Bad Romance


Todo comenzó con las imágenes difundidas por un canal de tele de Estados Unidos, donde se veía a una muy crecidita y sexy Miley Cirus bailando casi en plan lapdance con un hombre que aseguran tiene casi 45 años. La noticia ha dado la vuelta al mundo y muchísimos se han llevado las manos a la cabeza pensando dónde quedó aquella cándida y dulce Hanna Montana. Mientras leía la noticia, pinché en el link del nuevo video de Miley Cirus que, según esto, también ha causado polémica: Can't be tamed, que si muestra demasiada piel, que si demasiado sexy para una menor de edad y bla, bla, bla. A ciencia cierta, la imagen de Miss Cyrus no es nada del otro mundo, si acaso lo que más muestra es su admiración por Beyoncé sobre todo estéticamente hablando. Mucha coreografía grupal, vestuario un tanto estrambótico (Miss Cyrus presentada como una especie de ave rara en cautiverio) y tema-declaración casi sin pies ni cabeza :P

Como el video de Miss Cyrus era presentado por el canal Vevo, estuve mirando aquí y allá y me topé con el nuevo video de Christina Aguilera: Not myself tonight de su álbum Bionic que lanzará a principios de junio y que también ha causado gran revuelo porque aseguran que es una copia fiel del estilo y la estética de la mentada Lady Gaga :P Vevo me dijo que nanay, que no podía ver el video por restricciones de mi zona y no sé cuántas tonterías más. Así que hice un scouting por youtube y lo primero que encontré fue una presentación de Miss Aguilera en uno de los programas especiales de Oprah. A ver, presté atención y tampoco me pareció nada del otro mundo, si acaso, la imagen de Miss Aguilera recordaba y mucho a la de Madonna veinte años atrás en estilo Express yourself :P (por cierto, con un collar de la nueva colección de Dolce & Gabbana, si mal no recuerdo). Será que esto me pilla ya muy mayor, hahaha, será que no vivo pendiente del mundillo musical pop, o será que a estas alturas del partido ya todo está escrito, visto y lucido y vuelto a lucir y que las cabelleras rubias siempre nos remiten a la irremplazable Reina del Pop.

He de confesar que no conozco del todo a Lady Gaga. Por ejemplo, hasta el día de ayer tenía la idea de que era británica y resulta que es neoyorquina. Antes que sus dotes musicales, tuve conocimiento de su estrambótico estilo gracias a algunas revistas de moda que compro. A veces he visto sus canciones promocionadas por la tele con el fin de que la gente las adquiera como tonos para el móvil y en apenas unos flashazos veía detalles de sus videos. Hasta que mi amiga Bel colgó en su blog la canción Teeth y me quedé a cuadros con la letra: no, no es intrincada ni mucho menos, pero me va, me va, hahaha y también me gustó la interpretación, la voz sonaba muy bien y el estilo musical no eran taaan pop.

Total, que ayer también me auto-receté una buena dosis de Lady Gaga, visualmente hablando. Busqué los videos de sus hits y al final, llegué a la conclusión de que ya sea su discográfica o su manager, tienen un ojo excelente y la han sumido en una transformación radical que la ha beneficiado barbaridades: no hay compración entre Eh, eh (Nothing else I can say) tan naif, con una criaturita de melena oxigenada y amante de los rayos UVA y cancioncita moñas con ritmos que parecen escapar de un Casio, pasando por el cambio que apuntaba maneras de Poker face (con su melena lisa, oxigenada y los accesorios ¿faciales?) para llegar a la criatura indefinible de Bad Romance con video sin más hilo argumental que lucir a una Lady Gaga bien maquillada (destacando sus labios que lucen mucho más con colores oscuros que sin ellos) con cualquier cantidad de atuendos estrambóticos, la mayoría diseñados por el finado Alexander McQueen. Y por supuesto, varias escenas con coreografías grupales que tanto nos recuerdan a... Madonna ;-)

Ni Miss Aguilera ha copiado a Lady Gaga, aunque su nuevo video sea un calco con atuendos imposibles, coreografías grupales y cero argumento (también con altas dosis de influencia- Madonna en videos como Human Nature y Express Yourself), ni la artista cuyo nombre dice que eligió a raíz de la canción Radio Gaga de Queen es taaan original como han venido vendiéndola desde hace cosa de un par de años. Basta y sobra con repasar ya no los videos, sino toda la trayectoria de Madonna para darnos una idea de que por muy jóvenes y audaces que sean sus posibles sucesoras (creo que Lady Gaga tiene 23 o 24 añitos) no podrán innovar nada porque ha habido otra artista cuyo ojo avizor ha sido impecable e implacable. Si se trataba de levantar polémica, se partía desde el vestuario: aquellos elementos de lencería como atuendo para lucir dentro y fuera del escenario, mezclar telas, estilos y posteriormente, aliarse con un diseñador de alta costura, Jean-Paul Gaultier, reconocido enfant terrible. Cada álbum tenía personalidad propia y las giras eran (son hasta la fecha) planeadas milimétricamente. La artista no se duerme en sus laureles y siempre va un paso más allá de lo que su público puede esperar de ella o hasta sus detractores. Y sin duda ha triunfado gracias a la polémica, ni más ni menos. Talento tiene, eso nadie lo duda, pero también tiene una cabeza muy bien puesta. Algo que no sé hasta qué punto puede tener una niñata como Lady Gaga que ya ha comenzado con polémicas sexuales (demasiado pronto, quizás): que si primero era hermafrodita, algo que nunca aclaró ni desmintió; después, al ser entrevistada por una reconocida periodista de Estados Unidos, apenas y admitió cierta bisexualidad pero tampoco entró en detalles. Dirá que para eso ya está el video Telephone que a más de veinticinco millones de espectadores en youtube ha dejado con los dientes largos y tal vez no tanto por una escena de besuqueo entre Lady Gaga y una de sus super-masculinizadas compañeras de cárcel, sino por la cierta tensión sexual que prevalece entre ella y una Beyonce muy favorecida con el estilo pin-up que luce.

Nada nuevo bajo el sol del pop, para bien o para mal. Esperemos que Lady Gaga tenga bien plantados los pies sobre la tierra y se olvide un poquitín de esos taconazos que más de un disgusto le han dado en el escenario :P Y que si Christina Aguilera quiere volver a la palestra, quizá debería recurrir a estilos menos estrambóticos como en su penúltimo trabajo, que no necesita reforzar una fealdad que según Lady Gaga muestra "orgullosa" (parece ser que ha tenido serios problemas de autoestima, sobre todo cuando era adolescente) con su estilismo exagerado.