26 noviembre 2015

House on a hill




"House on a hill" - The Pretty Reckless

 Somewhere in the end of all this hate
There's a light ahead
That shines into this grave that's in the end of all this pain
In the night ahead there's a light upon this

House on a hill
The living, living still
Their intention is to kill and they will, they will
But the children are doing fine
I think about them all the time
Until they drink the wine and they will, they will, they will

Somewhere in the end we're all insane
To think that light ahead can save us from this
Grave that's in the end of all this pain
In the night ahead there's a light upon this

House on a hill
The living, living still
Their intention is to kill and they will, they will
But the children are doing fine
I think about them all the time
Until they drink the wine and they will, they will, they will

I am not afraid
I won't burn out in this place
My intention is to fade and I will, I will

In this house on a hill
The dead are living still
Their intention is to kill and they will, they will
Keep your children safe inside
Out of pocket, out of mind
Until they drink the wine and they will, they will, they will 



Del álbum "Going to hell" (2014)





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11 noviembre 2015

El arte más íntimo

Hace muchos años que me regalaron la novela Exquiste Corpse de Poppy Z. Brite pero a pesar del entusiasmo que me causó tal regalo y de la admiración por esa escritora, creo que no fue el momento más adecuado :P  Ahora, he descargado una versión traducida al castellano y oigan, me ha enganchado, a tal punto que me está costando hacer la tablet a un lado, jojojo.

"Para el asesino en serie británico Andrew Compton, matar es un arte: el arte más íntimo. Tras fingir su propia muerte para escapar de prisión, Compton se encamina hacia Estados Unidos con la intención de seguir perfeccionando su talento. Torturado por sus perversos deseos, llevado a poseer y asesinar chicos jóvenes, Compton se une a Jay Byrne, un playboy disoluto que ha llevado su arte a límites que ni siquiera él había imaginado. Juntos dirigen sus miradas hacia un chico de la calle, Tran, un americano con ascendencia vietnamita y de belleza exquisita a quien consideran la víctima perfecta.

Esta novela va dirigida a aquellos que se atreven a entrar en donde lo sagrado y lo profano se convierten en uno."
(Contraportada de la edición de Factoría de Ideas).


7 de abril de 2015

 


Aquí dejo la portada que con tan buen tino y gusto eligieron los que colgaron la versión digital de esta novela: se trata de una foto de la jovencísima Poppy cuando modelaba.




 "El informe de la autopsia efectuada en 1994 al asesino múltiple Jeffrey Dahmer revela que los funcionarios mantuvieron su cadáver atado con grilletes en los pies durante toda la necropsia: "Tanto era el miedo que inspiraba ese hombre", en palabras del patólogo Robert Huntington. Milwaukee Journal - AP, 17 de marzo de 1995"

Con este epígrafe (y una dedicatoria a su madre) comienza la novela Exquisite Corpse (El arte más íntimo) de Poppy Z. Brite, hoy conocida como Billy Martin en su condición de transgénero. Si muchos adoramos a esta escritora por su primera novela, Lost Souls, podemos caer en dos extremos tras la lectura de este trabajo que publicó cuatro años después: o la seguimos adorando o definitivamente la rechazamos.

PZB se recrea, quizás con dicha malsana, jojojo, en su historia de asesinos seriales atractivos, homosexuales, amorales y exquisitos. Los fluídos corporales que comienzan con S son sus favoritos, lo mismo que las vísceras, el desmembramiento, los cuerpos delgados, el canibalismo, la necrofilia y los rasgos orientales. Poppy-Billy no se corta ni un pelo y se recrea en descripciones precisas tanto de la vida sexual gay (normalita, hasta cierto punto, nada de locas emplumadas) como de los métodos de los asesinos Andrew y Jay. Quizás, para muchos, resultarán difícil digerir ambas pero Poppy se maneja con la elegancia suficiente y se nota, entre líneas, su gran admiración precisamente por Jeffrey Dahmer, llamado el Carnicero de Milwaukee, quien asesinó a más de veinte chicos antes de ser atrapado cuando una de sus víctimas logró escapar y pedir ayuda. La polícia encontró evidencia suficiente (si mal no recuerdo conservaba una cabeza congelada) y un corazón humano a medio freír, entre otras cosas, cuando entraron a su casa.

Y no, los asesinos a lo Poppy-Billy no remiten en ningún momento a Hannibal Lecter a pesar de sus 'métodos', su refinamiento y su canibalismo. La historia comienza en Londres pero transcurre mucho más en Nueva Orleans con su ambiente decadente y su elegancia antigua. En algún momento, hace referencia al mundo darkie pero apenas es un pincelazo. Es una gozada leer las descripciones tan precisas de calles, antros y alrededores de esa ciudad. También descubrir que los personajes principales como los asesinos Andrew y Jay, así como el joven amante de ascendencia vietnamita Tran y el escritor decadente Luke 'Lush Rimbaud' están tan bien dibujados con sus historias personales y sobre todo con esa lucha en un mundo infestado de sida pues Poppy-Billy ambienta la historia a principios de los 90. Y creo que este es uno de los puntos también destacables de Exquisite Corpse: la muestra dura y sin adornos de la psicosis, las consecuencias y los efectos del sida.

Poppy Z. Brite, hasta principios de la segunda década de los 2000, vivía como un 'transexual no operativo' segun sus propias palabras pero también recordamos que desde sus primeras entrevistas se confesaba como una mujer con mentalidad de gay. Según lo que se puede ver en los archivos de su bitácora en LiveJournal, lo mismo que en su página de Etsy donde vende su arte tan peculiar (accesorios artesanales y dibujos), de algunos años a la fecha ha comenzado con un tratamiento con testosterona (misma que consigue en Europa del Este a precios muy altos) y en muchas fotos ya se la puede ver con bigote y barba incipiente, cuerpo mucho más masculino (siempre tendió a subir y bajar de peso exageradamente y nunca fue una mujer con forma rotundas) pero a pesar de haber 'asumido' ya un nombre masculino: Billy Martin (en Facebook se la puede encontrar en un perfil personal bajo este nombre lo mismo que en Twitter) no deja claro si continúa escribiendo. 

Como Poppy, a partir del año 2000 cambió de estilo, por así decirlo y se dedicó a publicar reseñas culinarias en un periódico de Nueva Orleans, sobrevivió por los pelos al huracán Katrina, se separó de su compañero por casi veinte años (el chef Chris DeBarr) y publicó la trilogía Liquor de humor negro entre 2004 y 2006 donde sus personajes principales son una pareja gay de chefs.

10 de abril de 2015 



(Aquí se puede leer el post que le dediqué a Poppy en 2009)



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09 noviembre 2015

Ojalá no descanses mientras yo viva

"Ojalá no descanses mientras yo viva. Yo te maté. Persígueme. Persigue a tu asesino, toma cualquier forma, enloquéceme, pero no me dejes solo. No puedo vivir sin mi vida, no puedo morir sin mi alma."

Hace muchos, muchos años, cuando entendí que romántico no es sinónimo de cursi, aprecié profundamente la novela Cumbres Borrascosas. Y si hay un personaje que haya logrado llegar al fondo de mi corazón, es Heathcliff. Sobre todo después de la adaptación fílmica de 1992 donde un estupendo y guapísimo Ralph Fiennes lo interpretó.

Podemos llegar a odiar o despreciar a esa Cathy caprichosa y voluble, egoísta e inmadura pero no podemos negar que es la fuerza de la pasión encarnada. El vendaval que a su paso arrasa con todo. Heathcliff es el alma rebelde que necesita un contrapeso que lo centre. Son dos fuerzas que no se pueden vencer pero que se complementan. Dos fuerzas que sobreviven al tiempo y a la misma muerte.

Almas torturadas que exigen ser libres de todo dolor y pena y sin embargo son lo que las mantiene vivas, poderosas, con ese fuego que por más pequeñas que sean sus ascuas, resurge y se aviva.

Una lectura que se presta para cualquier momento, pero es en estas fechas (octubre) cuando más se aprecia porque nos muestra que la muerte no es precisamente el fin. Porque las almas inquietas, apasionadas o muchas veces maldecidas, siguen buscando la forma de permanecer entre los vivos.











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06 noviembre 2015

Lands end




"Lands end" - Siouxsie and The Banshees

Come take this hand at twilight's door
I'll meet you there we'll share the moonlit floor
Through the driving rain, colors run in veins
Ozone fills the air, two figures disappear


Come let's take flight, let's quit this scene tonight
Whilst they sleep on endless, in their wrecked designs
Sleep on endless in your wrecked designs


Moths touched by flame repeat their fatal game
Forever and eternally, the cliffs around the crashing sea
Unsolved and endless, wait for me


Undulating far below, where lucid waters flow
Their faces seem to know


Where the land falls to an end
This hidden tale begins
Take a walk with me down by the sea


Moths touched by flame repeat their fatal game
Forever and eternally, the cliffs around the crashing sea
Unsolved and endless, wait for me, wait for me


Take a walk with me down by the sea
Take a walk with me down by the sea
Take a walk with me down by the sea


Take a walk, take a walk, take a walk
Take a walk with me down by the sea
Take a walk with me down by the sea



Del álbum "Tinderbox" (1986)




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02 noviembre 2015

Días de muertos en México



Hace algunos años, publiqué dos post donde explicaba el origen del Día de Muertos en México y su forma de celebrarlo.

Aquí dejo los links  :)

- Día de Muertos I (pinchar aquí)

- Día de Muertos II (pinchar aquí)




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01 noviembre 2015

Los muertos chiquitos



Ofrendar significa compartir con los parientes y amigos fallecidos ciertos goces y algo de los frutos obtenidos de la anualidad pasada, así como ofrecer alimentos, además de los tradicionales que se ofrendan en cada población, los preferidos en vida por los difuntos. Todas las ofrendas o Altares de Muertos tienen la misma finalidad: recibir a los familiares difuntos para compartir con ellos los buenos frutos de la tierra, recordarlos y halagarlos. Pero sobre todo, tener presente de que a pesar de que se han ido, los días 1 y 2 de noviembre volverán para estar nuevamente reunidos con los suyos. La ofrenda es el reencuentro con un ritual que convoca a la memoria.

En muchas comunidades donde prevalecen las viejas costumbres, el repique de campanas de las iglesias, a las ocho de la noche del 31 de octubre, anuncia la llegada de los espíritus de los niños que "ya vienen". Para esa hora, las señoras de la casa ya tienen arreglado el altar: dos mesas puestas en dos niveles con manteles blancos o con papel de china, en donde se coloca la ofrenda para los "angelitos". Esta consiste en alimentos que les gustan a los niños: pan de muerto, fruta, elotes, atole de masa o "champurrado" (atole de chocolate), leche en jarritos especiales, tamales de dulce y de elote, arroz con leche, dulce de calabaza (calabaza en tacha), conserva de tejocotes y refrescos. Varias familias ponen juguetes de madera y barro: jarritos, canastitas, coches, muñecas de trapo, baleros, sin faltar en ningún lado las calaveritas de azúcar. 

Todo el día siguiente, 1 de noviembre, repican las campanas por el gozo que causa la visita de los infantes. La hora de retiro de los "chiquitos" varía, en algunos lugares lo hacen desde las doce del día, en otros lo llevan a cabo a las ocho de las noche.



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31 octubre 2015

Samhain 2015


Hoy es 31 de octubre :) 

Primer día de mis días favoritos del año

Halloween, Samhain

La palabra Samhain significa "el fin del verano". La víspera del 1 de noviembre, los druidas (sacerdotes celtas) sacrificaban un caballo en agradecimiento por la cosecha a los dioses y a los muertos, ya que se entendía que la abundancia provenía del mundo inferior donde los difuntos se ocupaban de producir lo que sus parientes vivos comerían y beberían y había que agradecerles su preocupación a la vez de ofrendarles las primicias de la cosecha. A media noche, los celtas prendían las hogueras rituales y se encendían las linternas que semejaban extraños rostros, pues se labraban en las cáscaras de grandes calabazas y se colocaban en las ventanas para espantar a los malos espíritus. Se creía que al abrirse las puertas del Más Allá, no sólo aparecerían las almas de los difuntos que sólo por una ocasión al año, visitaban a sus parientes, sino también espíritus malvados. 
 
 
Mircea Eliade, el famoso historiador de religiones, en alguno de sus libros dijo: "Semejantes a los granos enterrados en la matriz telúrica, los muertos esperan su regreso a la vida bajo una nueva forma. Por eso se acercan a los vivos, sobre todo en los momentos en que la tensión vital de las actividades está en su máximo, es decir, en las fiestas llamadas de la Fertilidad; cuando las fuerzas genésicas de la nauraleza y del grupo humano son evocadas, desencadenadas, exarcerbadas por ritos, por la opulencia y por la orgía. Las almas de los muertos están sedientas de todo rebozamiento biológico; de todo exceso orgánico porque este desbordamiento vital, compensa la pobreza de su sustancia y los proyecta en una corriente impetuosa de virtualidades y de gérmenes.


El festín colectivo representa precisamente esta concretización de energía vital; un festín con todo los excesos que implica, es pues indispensable tanto para las fiestas agrícolas como para la conmemoración de los muertos. Antaño, los banquetes tenían lugar juntos a las mismas tumbas, para que el difunto pudiese agasajarse con el exceso vital desencadenado junto a él.

Los muertos regresan en estos días para tomar parte de los ritos de fertilidad de los vivos. Si los muertos buscan las modalidades espermáticas germinativas, no es menos cierto que los vivos necesitan también de ellos para defender sus simientes y proteger las cosechas. Mientras los granos permanezcan sepultados, se encuentran también bajo la jurisdicción de los muertos. La "tierra matriz" o la Gran Diosa de la fertilidad controla del mismo modo el destino de las semillas y el de los muertos. Pero estos últimos están a veces más cerca del hombre y el labrador se dirige a ellos para que bendigan y sostengan su trabajo".

Estas ideas se mantuvieron en la mentalidad europea hasa el año 610, cuando el papa en turno, Bonifacio IV, ordenó que el día de muertos pagano debía cristianizarse bajo el aspecto de una fecha destinada a todos los mártires, surgiendo así el día de Todos los Santos. Sin embargo, la fecha que el papa determinó no fue al principio la que hoy se acostumbra celebrar, sino el 13 de mayo. Fue Gregorio III quien en el año 834 la cambió al 1 de noviembre que iba más de acuerdo con la tradición pagana. En Inglaterra se llamó a esa fecha "All Hallows" o "Haligan" y de ahí nació la palabra "Hallowe'en" o sea "Eve of All Hallows", víspera de Todos los Santos. Por fin, en el 993 se le agregó a la fiesta de los Santos Mayores que se ahora se celebra el 2 de noviembre en tanto que el culto ígneo al sol, simbolizado por las fogatas, se transfirió por analogía a las llamas del purgatorio de las cuales se libraban las almas por unas horas para visitar esa noche a sus parientes vivos.


A pesar de que en el medio rural se continúo festejando a los muertos y celebrando el Samhain durante la noche del 31 de octubre, Odilón, abad de Clunny, en 998, instituyó como fechas conmemorativas oficiales los días 1 y 2 de noviembre.

 
 
¡Feliz Samhain, Halloween!
 
 
 
 
 
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28 octubre 2015

Click-clack the Rattlebag de Neil Gaiman

Ilustración: Michael Kirkham/Heart

El pasado 29 de mayo el diario británico The Guardian publicó en exclusiva una de las historias que conforman la nueva antología de Neil Gaiman: Trigger Warning: Short fictions and disturbances.

Aquí la dejo :)


Click-clack the Rattlebag


"Before you take me up to bed, will you tell me a story?”


“Do you actually need me to take you up to bed?” I asked the boy.

He thought for a moment. Then, with intense seriousness, “Yes, actually I think you do. It’s because of, I’ve finished my homework, and so it’s my bedtime, and I am a bit scared. Not very scared. Just a bit.

“But it is a very big house, and lots of times the lights don’t work and it’s a sort of dark.”


 I reached over and tousled his hair. 

“I can understand that,” I said. “It is a very big old house.” He nodded. We were in the kitchen, where it was light and warm. I put down my magazine on the kitchen table. “What kind of story would you like me to tell you?”


“Well,” he said, thoughtfully. “I don’t think it should be too scary, because then when I go up to bed, I will just be thinking about monsters the whole time. But if it isn’t just a little bit scary then I won’t be interested. And you make up scary stories, don’t you? I know she says that’s what you do.”

 “She exaggerates. I write stories, yes. Nothing that’s been published, yet, though. And I write lots of different kinds of stories.”

“But you do write scary stories?”

“Yes.”

The boy looked up at me from the shadows by the door, where he was waiting. “Do you know any stories about Click-clack the Rattlebag?”

“I don’t think so.”

“Those are the best sorts of stories.”

“Do they tell them at your school?”

He shrugged. “Sometimes.”

“What’s a Click-clack the Rattlebag story?”

He was a precocious child, and was unimpressed by his sister’s boyfriend’s ignorance. You could see it on his face. “Everybody knows them.”

“I don’t,” I said, trying not to smile.

He looked at me as if he was trying to decide whether or not I was pulling his leg. He said, “I think maybe you should take me up to my bedroom, and then you can tell me a story before I go to sleep, but a very not-scary story because I’ll be up in my bedroom then, and it’s actually a bit dark up there, too.”

I said, “Shall I leave a note for your sister, telling her where we are?”

“You can. But you’ll hear when they get back. The front door is very slammy.”

We walked out of the warm and cosy kitchen into the hallway of the big house, where it was chilly and draughty and dark. I flicked the light-switch, but nothing happened.

“The bulb’s gone,” the boy said. “That always happens.”

Our eyes adjusted to the shadows. The moon was almost full, and blue-white moonlight shone in through the high windows on the staircase, down into the hall. “We’ll be all right,” I said.

“Yes,” said the boy, soberly. “I am very glad you’re here.” He seemed less precocious now. His hand found mine, and he held on to my fingers comfortably, trustingly, as if he’d known me all his life. I felt responsible and adult. I did not know if the feeling I had for his sister, who was my girlfriend, was love, not yet, but I liked that the child treated me as one of the family. I felt like his big brother, and I stood taller, and if there was something unsettling about the empty house I would not have admitted it for worlds.

The stairs creaked beneath the threadbare stair-carpet.

“Click-clacks,” said the boy, “are the best monsters ever.”

“Are they from television?”

“I don’t think so. I don’t think any people know where they come from. Mostly they come from the dark.”
“Good place for a monster to come.”

“Yes.”

We walked along the upper corridor in the shadows, walking from patch of moonlight to patch of moonlight. It really was a big house. I wished I had a flashlight.

“They come from the dark,” said the boy, holding on to my hand. “I think probably they’re made of dark. And they come in when you don’t pay attention. That’s when they come in. And then they take you back to their… not nests. What’s a word that’s like nests, but not?”

“House?”

“No. It’s not a house.”

“Lair?”

He was silent. Then, “I think that’s the word, yes. Lair.” He squeezed my hand. He stopped talking.
“Right. So they take the people who don’t pay attention back to their lair. And what do they do then, your monsters? Do they suck all the blood out of you, like vampires?”

He snorted. “Vampires don’t suck all the blood out of you. They only drink a little bit. Just to keep them going, and, you know, flying around. Click-clacks are much scarier than vampires.”

“I’m not scared of vampires,” I told him.

“Me neither. I’m not scared of vampires either. Do you want to know what Click-clacks do? They drink you,” said the boy.

“Like a Coke?”

“Coke is very bad for you,” said the boy. “If you put a tooth in Coke, in the morning, it will be dissolved into nothing. That’s how bad coke is for you and why you must always clean your teeth, every night.”

I’d heard the Coke story as a boy, and had been told, as an adult, that it wasn’t true, but was certain that a lie which promoted dental hygiene was a good lie, and I let it pass.

“Click-clacks drink you,” said the boy. “First they bite you, and then you go all ishy inside, and all your meat and all your brains and everything except your bones and your skin turns into a wet, milk-shakey stuff and then the Click-clack sucks it out through the holes where your eyes used to be.”

“That’s disgusting,” I told him. “Did you make it up?”

We’d reached the last flight of stairs, all the way in to the big house.

“No.”

“I can’t believe you kids make up stuff like that.”

“You didn’t ask me about the rattlebag,” he said.

“Right. What’s the rattlebag?”

“Well,” he said, sagely, soberly, a small voice from the darkness beside me, “once you’re just bones and skin, they hang you up on a hook, and you rattle in the wind.”

“So what do these Click-clacks look like?” Even as I asked him, I wished I could take the question back, and leave it unasked. I thought: Huge spidery creatures. Like the one in the shower that morning. I’m afraid of spiders.

I was relieved when the boy said, “They look like what you aren’t expecting. What you aren’t paying attention to.”

We were climbing wooden steps now. I held on to the railing on my left, held his hand with my right, as he walked beside me. It smelled like dust and old wood, that high in the house. The boy’s tread was certain, though, even though the moonlight was scarce.

“Do you know what story you’re going to tell me, to put me to bed?” he asked. “It doesn’t actually have to be scary.”

“Not really.”

“Maybe you could tell me about this evening. Tell me what you did?”

“That won’t make much of a story for you. My girlfriend just moved in to a new place on the edge of town. She inherited it from an aunt or someone. It’s very big and very old. I’m going to spend my first night with her, tonight, so I’ve been waiting for an hour or so for her and her housemates to come back with the wine and an Indian takeaway.”

 “See?” said the boy. There was that precocious amusement again. But all kids can be insufferable sometimes, when they think they know something you don’t. It’s probably good for them. “You know all that. But you don’t think. You just let your brain fill in the gaps.”

He pushed open the door to the attic room. It was perfectly dark, now, but the opening door disturbed the air, and I heard things rattle gently, like dry bones in thin bags, in the slight wind. Click. Clack. Click. Clack. Like that.

I would have pulled away, then, if I could, but small, firm fingers pulled me forward, unrelentingly, into the dark.



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24 octubre 2015

John Landis y un hombre lobo



No soy fiel amante de los hombres lobo, a pesar de que tengo un par de historias que estoy por aterrizar y que tocan este tema, pero dentro de mis pelis favoritas de terror siempre hay un lugar reservado para varias de ellas que son protagonizadas por esta salvaje criatura.

Recuerdo cuando vi por primera vez Un hombre lobo americano en Londres, lo mucho que me gustó su mezcla de humor y terror y por supuesto, pertenezco a esa generación que quedó marcada para los restos con la transformación total del pobre David (David Naughton) al ritmo de Blue Moon, jejeje. Y un par de años después, en cierta medida repetimos la experiencia con el video Thriller de Michael Jackson.

Quizá, a estas alturas del partido, con tanto derroche de efectos digitales, la transformación made by el genio de Rick Baker, no cause el mismo impacto. Pero sin duda, la historia del chico americano que es mordido por un hombre lobo británico marcó un antes y un después en la filmografía de la criatura más lunática del celuloide. Por cierto, hablando de clásicos, estoy que muero de impaciencia por ver (el estreno está previsto para el próximo mes de febrero de 2010 la nueva versión de The Wolfman protagonizada por Benicio del Toro ;-) Aquí el tremendo trailer.

El 15 de septiembre de 2009, en Estados Unidos, se puso a la venta la edición Blu-ray de Un Hombre Lobo americano en Londres y la revista de cine Fotogramas en su edición número 1.992 entrevistó a John Landis, su insigne director :)


Un origen violento

"Escribí el guión en 1969, con 18 años, en el rodaje de Los Violentos de Kelly (Brian G. Hutton, 1970), una cinta bélica con Clint Eastwood y Telly Savallas en la que trabajaba de lo que hoy sería asistente de producción. Así que ahí me tienes, en Yugoslavia, perdido en un pueblecito lleno de gitanos que creían ciegamente en todo lo sobrenatural cuando acabábamos de poner a un hombre en al Luna. Y de ahí salió la idea de escribir una historia de terror."

Los padres de la criatura
"Conocí a Rick Baker (maestro del maquillaje) en 1971, cuando rodamos El Monstruo de las Bananas, mi primera película. Tenía tanto talento que le conté que tenía un guión sobre hombres lobo y que ya podía ponerse a trabajar en ello. Quería que se viera todo y eso era complicadísimo porque, por extraño que parezca, en ese momento no existían los efectos digitales. ¡Era el medioevo! Años después conseguí el dinero y le llamé. Me dijo que no podía, que iba a trabajar en otra película de hombres lobo (el film era Aullidos de Joe Dante). No me lo podía creer. Al final lo solucionamos pero, después de una eternidad sin ningún hombre lobo en el cine, ese año se rodaron... ¡tres! Una locura."

Terror encasillado
"Nadie quería financiar la película. Decían que era divertida pero que daba miedo. ¡Claro! ¡Es una película de terror, estúpido! Los estudios necesitaban saber qué tienen entre manos y combinar comedia y terror no les cuadraba. Después de Desmadre a la americana/ Animal House (1978) y Granujas a todo ritmo/The Blues Brothers (1980), dos films que dieron millones a paletadas, me dijeron el dinero para que rodara lo que quisiera."

El tiempo lo cura todo
"Peter Bogdanovich dijo que el verdadero juez de un film es el tiempo. El año que viene cumpliré 60 años y, echando la vista atrás, veo que muchas de mis películas que, pese a ser éxitos de taquilla, fueron masacrados por la crítica de hoy son considerados clásicos. Y recuerdo otra cita, esta de John Huston: Los edificios, las prostitutas y los directores de cine ganan respeto con los años. Uno ya es mayor y se lo toma todo con un humor así que, más que como un director clásico, me veo como la Torre Eiffel."

Miedos reales
"Esta avalancha de cine torture-porn (Saw, Hostel y variantes) entroncaron con la institucionalización del gore de los 70 a raíz del éxito de La Matanza en Texas (Tobe Hooper, 1974). Reflejan el mundo en el que vivimos: las fotos de Abu Ghraib, Dick Cheney... Eso sí que da miedo."

Mucho más, mucho mejor

"Soy consciente de que hay una gran parte de público que ve el cine en su casa. Por eso nunca he rodado en Scope: la gente eía las películas en su TV y en una copia de VHS patética. Eso es historia. La nueva edición de Un hombre lobo americano en Londres aprovecha la calidad de imagen de Blu-ray hasta el punto que se ve más gore de lo que es en realidad."

¡Extra! ¡Extra!
"Soy un fanático de las ediciones especiales. Cuando dirigí Thriller, con Michael Jackson, ya sacamos el making of para financiarlo... En esta edición tenemos de todo. Mi preferido es el documental Cuidado con la Luna, una joya para los fans con docenas de entrevistas, visitas a las localizaciones, influencias... Es ridículo: ¡es incluso más largo que la película!"




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